Esta receta sencilla, pero no tanto como los crepes que los traeré mas adelante.
Ingredientes:
- 190g Harina
- 1cda Levadura química o en polvo
- 1 Huevo
- 2cdas Azúcar (OPCIONAL) se puede añadir más o menos cantidad, según vuestros gustos o con qué os lo vais a comer.
- 310ml Leche
- 40g Mantequilla
- Una pizca de sal
- 1 cdta Vainilla (extracto o 1/2 en pasta) o Canela, con uno de estos 2 ingredientes le dan un muy buen sabor.
Ponemos la leche templada, la mantequilla fundida, el huevo y la vainilla (si la usamos); en un bol grande, mezclamos hasta que esté todo bien incorporado. Añadimos la sal y el azúcar y lo incorporamos. Después, tamizamos la harina, la levadura y la canela si la usamos. Lo mezclamos con movimientos envolventes sin sobrebatir la masa, evitando los grumos. Tiene que quedar una textura intermedia, ni muy fluida y líquida como un bizcocho ni con grumos.
Dejamos reposar la masa tapada a piel durante 20 minutos a temperatura ambiente.
Calentamos la sartén, para que queden mejor tenemos que coger la que esté en mejor estado y añadirle muy poco aceite o mantequilla para que no se pegue, hay que evitar que se pegue no hay que freírlo.
Cuando la sartén esté caliente echamos una cucharada colmada de la masa y esperamos hasta que le salga muchas burbujas, comprobamos que esté bien hecho y le damos la vuelta, lo mismo por la otra cara. Es muy importante no volver a darle la vuelta, el proceso es: cara, cara, fuera, siguiente.
Ahora toca echarle lo que más nos guste y disfrutar.
Madre mía, q bien suena todo! Un dia q tenga tiempo me pondré a hacer unos buenos pancakes
ResponderEliminarSeguro que te salen genial! Si tienes alguna duda pregúntala en los comentarios.
Eliminarmenuda pinta mas buena
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